En el marco de la estrategia “Cúcuta Territorio Seguro”, La Policía Nacional a través del Grupo de Acción Unificada por la Libertad Personal (GAULA MECUC) en coordinación con el Gaula Militar, capturaron en flagrancia dos presuntos integrantes del Grupo Delincuencial Común Organizado (GDCO) AK-47.
Los capturados están vinculados a una serie de ataques a establecimientos comerciales en diferentes sectores de la ciudad, donde empleaban armas de fuego para generar intimidación y posteriormente exigir sumas económicas a los propietarios.
“En el caso más reciente, ocurrió el pasado 5 de diciembre en el barrio Brisas de Molinos de la comuna 6, donde perdió la vida un hombre, trabajador de una ferretería, tras recibir un impacto de bala”, indico el coronel William Quintero Salazar comandante de la Policía Metropolitana de Cúcuta.
Después de perpetrado el homicidio, se iniciaron labores investigativas y de verificación de información en el lugar de los hechos, allí, un hombre que se disponía abordar una motocicleta, la cual presentaba las mismas características a la que fue utilizada por los homicidas el día 5 de diciembre, al ver la presencia de los uniformados empezó a disparar en su contra, hiriendo a un soldado profesional.
Sin embargo, el despliegue de las unidades permitió la detención efectiva de los dos sujetos, uno de ellos tras caer de un tejado donde intentaba esconderse. Los detenidos, luego de darles a conocer los derechos que tienen como capturados fueron trasladados a las instalaciones de la Unidad de Reacción Inmediata (URI) de la Fiscalía y puestos a disposición de la autoridad judicial competente.
Se estima que estos sujetos recaudaban más de $5.000.000 millones de pesos mensuales mediante extorsiones, con exigencias iniciales y pagos semanales por $500.000 a sus víctimas. Hasta la fecha, se han registrado varias denuncias relacionadas con esta actividad ilícita.
Después de realizadas las audiencias de legalización de captura, imputación de cargos y medida de aseguramiento un juez de control de garantías envió al centro penitenciario y carcelario a “Josver” de 19 años, natural de Venezuela, mientras que su compañero de 21 años de edad, quedo en libertad, pero vinculado al proceso judicial.
